🚗 Presión de llantas: lo que muchos olvidan

¿Por qué la presión de las llantas es tan importante?

Las llantas son el único punto de contacto entre tu vehículo y el suelo. Mantener la presión correcta no solo mejora el confort al conducir, sino que influye directamente en la seguridad, el consumo de gasolina y la durabilidad del neumático.

Cuando una llanta no tiene la presión adecuada, el peso del vehículo no se distribuye correctamente, afectando la tracción, el frenado y el control. A largo plazo, esto puede provocar un desgaste irregular y aumentar el riesgo de accidentes.

⚠️ Qué pasa si manejas con presión incorrecta

Presión baja:

Aumenta la fricción con el pavimento y eleva el consumo de combustible.
Provoca desgaste en los bordes del neumático.
Genera sobrecalentamiento y riesgo de reventón.

Presión alta:

Reduce el área de contacto con el suelo.
Dificulta el frenado y hace el manejo más brusco.
Desgasta el centro del neumático y reduce su vida útil.

Ambos casos afectan la estabilidad del vehículo y el confort del manejo.

🧭 Cómo saber cuál es la presión ideal

Cada vehículo tiene una presión recomendada diferente. Puedes encontrarla en:

El marco de la puerta del conductor.
La tapa del tanque de gasolina.
El manual del propietario.

Por lo general, el rango se encuentra entre 30 y 35 PSI, pero siempre es mejor seguir las especificaciones exactas de tu modelo.

🔧 Cómo revisar la presión correctamente

Hazlo con las llantas frías, antes de conducir más de tres kilómetros.
Usa un manómetro o medidor de presión (digital o de aguja).
Quita la tapa de la válvula, coloca el medidor y verifica la lectura.
Ajusta el aire según lo recomendado: añade o libera hasta alcanzar la medida correcta.
Vuelve a colocar las tapas para evitar fugas.

No olvides revisar también la llanta de refacción, ya que suele perder aire con el tiempo.